Retrospectiva TPH A
En lineas generales, el desarrollo del tph fue como una montaña rusa de emociones.
Hubo una día en la que una reunion en la que suponiamos que ibamos a poder avanzar un montón, no lo logramos realmente debido a que casi todo lo que ibamos probando no nos funcionaba con respecto a la estructura. Finalmente despues de todo el dia, nos fuimos frustrados a nuestras casas pero ya al menos con un planning semanal, lo cual fue clave para llegar a la entrega. Al siguiente dia ya mandamos a cortar laser unas pruebas en cartón de una idea que surgió de la mezcla de un referente y nuestra idea conceptual.
Acorde al planning, decidimos dividirnos para ser mas efectivos con el uso del tiempo con respecto a las pruebas del material y la clase de teorica a la que debiamos asistir.
Ese mismo jueves fue el salto que nos permitió mandar a cortar lo que nos faltaba el viernes y tener todo para sabado y domingo poder ensamblar.
El ensamblaje tambien fue un proceso algo atolondrado por las características que debiamos cumplir para que las pelotitas no se salieran de los caminos pero que a su vez las paredes del material no se nos cayeran por la velocidad con la que las chocaban.
Toda la experiencia fue interesante y a la vez agobiante por los tiempos y la presion de que tenia que funcionar si o si pero lo logramos y cumpliendo los requisitos de no utilizar uniones que no fueran de carton y favorecer el reciclaje.
Estuvo bueno poder irnos con una bolsita con piezas que se pueden volver a utilizar y reconfigurar y no tener que tirar todo el prototipo como sucedió en muchos casos de la cátedra.
Hubo una día en la que una reunion en la que suponiamos que ibamos a poder avanzar un montón, no lo logramos realmente debido a que casi todo lo que ibamos probando no nos funcionaba con respecto a la estructura. Finalmente despues de todo el dia, nos fuimos frustrados a nuestras casas pero ya al menos con un planning semanal, lo cual fue clave para llegar a la entrega. Al siguiente dia ya mandamos a cortar laser unas pruebas en cartón de una idea que surgió de la mezcla de un referente y nuestra idea conceptual.
Acorde al planning, decidimos dividirnos para ser mas efectivos con el uso del tiempo con respecto a las pruebas del material y la clase de teorica a la que debiamos asistir.
Ese mismo jueves fue el salto que nos permitió mandar a cortar lo que nos faltaba el viernes y tener todo para sabado y domingo poder ensamblar.
El ensamblaje tambien fue un proceso algo atolondrado por las características que debiamos cumplir para que las pelotitas no se salieran de los caminos pero que a su vez las paredes del material no se nos cayeran por la velocidad con la que las chocaban.
Toda la experiencia fue interesante y a la vez agobiante por los tiempos y la presion de que tenia que funcionar si o si pero lo logramos y cumpliendo los requisitos de no utilizar uniones que no fueran de carton y favorecer el reciclaje.
Estuvo bueno poder irnos con una bolsita con piezas que se pueden volver a utilizar y reconfigurar y no tener que tirar todo el prototipo como sucedió en muchos casos de la cátedra.
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